Es común que se malinterprete mi actitud escéptica generalizada con rencor apuntado a personas en específico. Frases como "ya es tiempo de dejarlo ir" son comunes al momento de opinar respecto a cómo uno maneja altercados con otros en el tiempo. Como si la respuesta a todo fuera olvidar.
No, no voy a olvidar las cosas que no me parecieron bien, no me voy a culpar (por sobre lo que ya me culpo) por cosas que no fueron mi responsabilidad, y no, no tengo rencor por personas que alguna vez hicieron algo que me afecto o afectó a alguien cercano. Ese tipo de personas solo pasa al subconjunto de conchesupicos que no me interesan, y siendo simple, eso incluye a cualquier persona fuera de mi grupo cercano de amigos.
Pero no me puedo permitir olvidar cosas que me hicieron sentir mal o que desbalancearon mi realidad, porque no hay nada que te haga sentir peor que equivocarte dos o más veces en algo conocido. Y no tiene que ver con las persona directamente, tiene que ver con determinar qué cosas no quieres para tu entorno cercano y lo que esas personas fueron capaces de hacer. No es cerrarse a la posibilidad de cambio, es prepararse para afrontar la opción más probable: Pocas personas están dispuestas a cambiar realmente.
Con mis mejores amigos más viejos ya cumplí 30+ años, con los más nuevos voy pasando los 15, y eso me lleva a decidir ser drástico, jugar es gratis, pero a esta altura me tengo que limitar a solo un crédito por persona.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario