No quiero ponerme a hablar de 'literatura', porque sencillamente no tengo idea de ello, yo absorbo historias, sea cual sea la fuente, cuentos, videojuegos, novelas, cómics, películas y de cualquier género, siendo mis favoritos la ciencia ficción y la fantasía. Y he disfrutado desde siempre, con ojo crítico, todas las historias que se me han cruzado, desde aquella maravillosa historia de 1985, Back to the Future (mi favorita de todos los tiempos) hasta Whiplash (que acabo de ver hace dos días y que me llevó a escribir esto). Y no paso las historias mal contadas, punto. No me gustan los vacíos no pensados y las historias que apuntan a excitar de una manera forzada a la audiencia, me gustan los finales acordes a la historia, los finales que son adecuados a lo que ha pasado, sin descartar de ninguna forma un buen twist, pero tiene que ser justamente justificado.
Whiplash logró emocionarme hasta los huesos sin personajes con los cuales empatizar, una historia que no podría estar más alejada de lo que soy yo o de lo que pienso sobre la vida y que, por sobre todo, no tiene un final feliz. Deja al espectador con la libertad de interpretar el final y de darle un significado a ese momento cúlmine en la historia, esos últimos 5 minutos que te obligan a pararte del asiento emocionado, empuñando fuertemente tu mano, mientras ves el punto exacto en que todas la motivaciones e ideas de la película llegan a su máxima y convergen en una escena final perfectamente dirigida. Una maravilla de película, una joya de lo que yo considero bueno.
Una historia no debería ser escrita en el camino, con lo que salga. Tampoco debe ser pensada como los sucesos para llegar a esto que imaginé (siendo el autor), jamás resultará normal, jamás logrará trascender. Los personajes deben ser creados con anticipación, deben ser tatuados en el autor, deben existir como entes sólidos en la mente de su creador, casi como conocer un nuevo amigo, debe tener gustos, pasatiempos, pasado, muletillas, opciones de vida, familiares, temas que maneje, temas prohibidos, tabús, odios, palabras más usadas, manías, amores pasados, un todo, luego enfrentar a ese personaje a las situaciones de la historia y no al puto revés. Detesto los personajes unidimensionales, los que poseen como motivación de existencia la trama de la obra ¡DIOS!, si el hilo principal de la historia no es el único que tienen los personajes, uno no tiene un puro hilo en su vida, tiene varios planos, niveles, matices, todo junto forma una personalidad, algo sólido, algo creíble.
No paso las sagas para quinceañeras y no quiero dar nombres, porque podría herir los sentimientos de más de alguno (como si me importara) *COF HUNGER GAMES COF*, pero de ellos está lleno el mercado, lleno de historias ligeras, de personajes que son forjados en su propia historia cuando debería ser al revés, ellos deberían doblar la historia con sus personalidades, equivocarse, crecer y volver a intentar doblarla. Son personajes creados para agradar a un grupo de personas, quedando relegados a esas pocas características, borrándoles cualquier indicio de personalidad que pudiera molestar a alguien, limitados al cliché y a los mandatos del fandom, una bosta ('CULEANDO CON BATMAN', TE ESTOY MIRANDO A TI TAMBIÉN).
Como dijo un amigo, no deberías escribir pensando en tu público, es una falta de respeto, deberías escribir pensando en que a ti te guste la historia, como autor, para entregarles a tus lectores un mejor producto, algo que no esperen, algo nuevo que disfruten por ser diferente o por ser lo que esperaban, pero que sea lo que el escritor decida.
Later, dudes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario