Aquí a lo que voy: Esa sensación de anormalidad es lo que en muchos casos me hacen mantener el camino y darle pa' adelante con lo que se tenga a mano no más y estando conciente de lo que se dicen de personas masomenos frías de pensamiento, que asumen su morbosidad y su violencia como algo inevitable, por ejemplo.
No me gustan las cosas tan normales (No confundir cosas tranquilas con normales, me gusta la tranquilidad) me gutan impresionarme y no pudo haberlo explicado mejor que un sartén lleno de pollo en una noche común.
Mientras me comía el pollo, recordé una conversación de la tarde y me retracto, mi autocontrol es más que suficiente y lo respeto totalmente, no sé qué me hizo dudar de él, si mirando para atrás casi SIEMPRE funciona a la perfección y me ha salvado en muchas ocaciones.
Y eso . . .
"Face it, tiger ... You just hit the JACKPOT!"


Chao ponis.